miércoles, 19 de agosto de 2009

LOS ALUMNOS APATICOS Y LOS ABULICOS

Quiénes son los APATICOS Y ABULICOS

Estrictamente son apáticos (a - sin; pathos - sentimiento) los que no sienten interés, estímulo, gusto y atractivo natural por una labor necesaria o convenien-te, como es la del trabajo intelectual o escolar. Y son abúlicos (a- boulomai, sin querer, sin voluntad) los que tienen la voluntad tan débil que no son capaces de querer una cosa o, si la quieren, no resisten mucho tiempo en su disposición, sino que olvidan su opción muy pronto.
Aunque abúlicos y apáticos son conceptualmente personas con carencias di-ferentes, en la práctica se identifican en las mismas consecuencias. Son perso-nas dominadas por una atonía que las lleva a la indolencia, a la pereza, a la pasi-vidad mental y moral. No sienten interés y por lo tanto no quieren el estudio; y, si no lo quieren, se hunden en todos los males consecuentes: marginación, ig-norancia, indiferencia, insensibilidad, aburrimiento, parálisis escolar.
Estos escolares acumulan ignorancia por falta de esfuerzo y se resisten a ad-quirir hábitos ordenados de trabajo, al ser incapaces de superarlos y advertir las consecuencias irremediables que su situación presente va a producir en el por-venir

Causas:
La situación paralítica de estos escolares no siempre se debe a debilidad y carencia de energía moral o intelectual. Con frecuencia existe un ingrediente somático, el cual tiene que ver con el sistema nervioso y sobre todo con el en-docrino. Determinadas hormonas, como la adrenalina o la tiroxina, y determina-das estructuras nerviosas de índole asténico, se hallan en la base de la desgana operativa que les invade cuando de labores intelectuales se trata.

Por eso no basta dar buenos consejos para hacer salir a los sujetos de esa situación de pasividad. Porque ellos ven en buena lógica que no van bien y que es preciso superar la fatalista situación en la que se hallan. Pero son incapaces de mantener las decisiones que adoptan o de cumplir las promesas que formu-lan ante las demandas de sus padres o maestros.
En ocasiones es verdad que la causa está en una mala educación, excesiva-mente condescendiente: se han tolerado en exceso los caprichos, los resultados inmediatos deficientes e incluso los chantajes afectivos. Se han vinculado los premios sensoriales a los aciertos escolares. Y se han impulsado psicológica-mente situaciones viciosas, como son los pseudonegocios académicos en los que se vinculan los esfuerzos a las recompensas y no a valores firmes.
Aunque no son muy frecuentes los bloqueos escolares por este motivo, al menos en los niveles de la infancia, pueden existir en la mente de muchos pa-dres o educadores. Pero terminan pronto los chantajes cuando los que promue-ven tales juegos advierten que no dan resultado y que antes o después tienen que acabarse.

TAREA
Mat.- Mañana revisión del cuaderno, debe estar el problema que trabajamos hoy pegado y resuelto si es que estuvo con baja calificación, en libro continuamos trabajando la pág. 274. Lleva exámen para ser firmado y archivado. Mañana habrá recuperación de la misma.
CTA.- Mañana obligatorio llevar el cuaderno.